Artes escénicas

En una época de la vida de los adolescentes en la que el centro emocional del cerebro (sistema límbico) está bien (o demasiado) desarrollado y el córtex frontal que controla la lógica y la toma de decisiones está muy poco desarrollado, participar en teatro ofrece a los alumnos un lugar seguro para asumir riesgos y explorar las emociones.

Estadísticamente, los estudiantes de teatro tienen tres veces más probabilidades de obtener premios por asistencia y notas que los que no estudian arte. Obtienen 91 puntos más en el examen SAT y tienen el doble de probabilidades de graduarse en la universidad. Los estudiantes de teatro procedentes de entornos con bajos ingresos tienen una baja tasa de abandono del 4%.

El reparto y el equipo trabajan juntos bajo presión, piensan de forma crítica y creativa, y muestran una fuerte ética de trabajo que las universidades y los empleadores valoran. Google descubrió que las principales habilidades de sus empleados son la comunicación, la empatía, el pensamiento crítico, el respeto y la conexión de ideas.

Los estudiantes con una fuerte ética del trabajo se convierten en trabajadores de alta calidad, lo que se traduce en mejores salarios y más gasto en nuestra economía. Además, los artistas votan en un 86%, frente al 60% de los demás. Los estudiantes de teatro se preocupan por las personas y el planeta, piensan globalmente y hacen más voluntariado que sus compañeros.